Construcción de laboratorios clínicos: paso a paso
1. Licencias y permisos
Uno de los principales es contar con el Aviso de Funcionamiento y el Aviso de Responsable Sanitario, ambos expedidos por la Comisión Federal para la Protección contra Riesgos Sanitarios (COFEPRIS). Sin estos permisos, un laboratorio simplemente no puede operar.
Por ejemplo, para el uso de fuentes de radiación ionizante, necesitarás presentar la Licencia Sanitaria y Permiso de Responsable de la Operación y Funcionamiento de Establecimientos de Diagnóstico Médico con Rayos X. Para la gestión de trámites, lo mejor es consultar a una empresa especialista como Infraestructura Médica, la cual te garantizará un estricto cumplimento de los requisitos legales y burocráticos.
2. Ubicación e infraestructura
Antes de seleccionar un lugar de emplazamiento, es conveniente realizar una investigación de mercado que fundamente tu decisión. Asegúrate de situarte en una zona cercana a uno o más hospitales, o bien, que sea de alta afluencia vial y peatonal. Igualmente, es importante que consideres la disponibilidad de servicios de laboratorio médico en el lugar de tu interés; si llegas a una colonia o municipio donde se hallen más clínicas, te será más difícil posicionarte y necesitarás de un buen diferenciador que te permita ganar un lugar en el mercado.
El lugar que elijas para edificar tu laboratorio también deberá poseer ciertas dimensiones que le permitan incluir las áreas imprescindibles establecidas por la Norma Oficial Mexicana:
- Recepción y sala de espera.
- Servicios sanitarios (para el personal y para los pacientes).
- Área para toma de muestras.
- Área para clasificación y resguardo de muestras.
- Área para la realización de estudios de laboratorio.
- Zona específica para lavado, esterilización o sanitización de material.
- Almacén para sustancias, materiales y reactivos.
- De ser necesario, área para el depósito y almacenamiento temporal de residuos peligrosos.
3. Personal y equipamiento
Según se estipula en la NOM-007-SSA3-2011, el responsable de un laboratorio debe ser un químico experimentado en las necesidades técnicas del recinto o un médico cirujano especializado en patología clínica. Para el buen funcionamiento de tu proyecto, es muy probable que también necesites de la colaboración de profesionales como:
- Bacteriólogos
- Patólogos
- Bioquímicos
- Farmacéuticos
- Enfermeros
- Técnicos laboratoristas
Cada uno de los integrantes del equipo médico debe contar obligatoriamente con un título expedido por una institución de enseñanza superior que cuente con reconocimiento oficial o, en el caso del personal técnico, con un diploma que valide sus competencias. Debido a los acelerados avances de la tecnología y a los ininterrumpidos aportes de la investigación médica, es recomendable preparar una partida presupuestal para pagar cursos y capacitaciones constantes que mantengan actualizado a tu personal.
4. Mercadotecnia
Sin embargo, aunque contar con instalaciones de primer nivel es crucial para el éxito de la clínica, el inmueble no lo es todo; una vez finalizados los procesos de edificación y adecuación de interiores, es preciso emprender una campaña de mercadotecnia que dé a conocer los servicios y ventajas que ofrece el laboratorio. Para este plan de difusión, será sumamente útil la información que recabaste con la investigación de mercado que te recomendamos hacer en el primer punto. 5. Para recordar
Por último, hay que tomar en cuenta que, según señala la ley, la construcción de laboratorios clínicos debe culminar en una prestación de servicios apegada a determinados principios éticos. La dignidad de los usuarios debe ser prioritaria, así como el respeto a su derecho a recibir información clara y completa sobre los servicios y procedimientos que proporciona la clínica. De igual forma, el laboratorio debe comprometerse a proteger la confidencialidad de todos los datos personales que recibe y a llevar un registro cronológico de los estudios que realiza.
